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Casa Grande
Indicios de sus primeros habitantes
Por: Augusto Salazar
Indicios de sus primeros habitantes
Por: Augusto Salazar
PAIJÁN
Los esqueletos humanos más antiguos
En 1975 el arqueólogo francés Claude Chauchat descubrió los restos óseos de un niño y de una mujer enterrados hace 10,000 años en la Pampa de Paiján los mismo que se presume habitaron también los valles que ahora conforma Casa Grande-Perú. Los estudios radiocarbónicos le dieron una antigüedad mayor que a los esqueletos de Lauricocha descubiertos por Augusto Cardich en 1959. Casa grande-Perú y toda la costa norte del Perú fue poblada por cazadores, recolectores, pescadores y marisqueros durante el Holoceno Temprano. Los Hombres de Paiján (distrito de Paiján que colinda con el distrito de Casa Grande) desarrollaron una industria lítica de puntas de proyectil con pedúnculo conocidos ya desde 1948 gracias a Rafael Larco Hoyle. Casa Grande-Perú y Paiján se ubican en la cuenca del Río Chicama en el departamento de La Libertad región donde también se desarrollaron los Hombres de Huaca Prieta (del Arcaico Tardío) , las Cultura Cupisnique, Salinar y Gallinazo (del Formativo), y los reinos Mochica (Intermedio Temprano) y Chimú (Intermedio Tardío).
LAS CULTURAS PRE INCAS QUE OCUPARON LOS VALLES DE CASA GRANDE-PERÚ
La primera cultura preinca que habito los valles de Casa Grande-Perú fue la cultura Mochica que hace su primera aparición en el valle chicama aproximadamente en el año 200 d.c. hasta el 700 d.c. Luego la cultura chimú ( en los años 700 d.c. hasta los años 1400 d.c. que surgen al decaer el imperio Wari). Conquista al pueblo Mochica que al mismo tiempo los consideraba sus antepasados y los veneraban adquiriendo ciertas costumbre laborales como las construcciones de barro. Límites y ubicación de Casa Grande-Perú Esta ubicado en la provincia de Ascope del departamento de La Libertad. Al norte limita con: la ciudad de Ascope, San José Alto y cerro San Antonio; al sur: con Eriazos de Chiquitoy, Magdalena de Cao y Los Molinos; al este: con las estribaciones de los cerros de Chicama, Sausal y Casa Quemada; y al oeste: con el cerro Yugo, Cerro Azul, Comunidad de Paiján y terrenos de Salamanca
Perú
Departamento de La Libertad
Provincia de Ascope - Distrito de Casa Grande
Historia de Casa Grande Su origen en la Colonia con la Producción de Caña Carta topográfica colonial de Trujillo y el valle de Chicama
La historia de la Hacienda Casa Grande, la hacienda azucarera que a lo largo del siglo XIX agrupó una concentración de tierras nunca antes vista en el valle de Chicama y en la costa del Perú, llegando a competir mano a mano en la producción mundial de azúcar con los emporios de Hawaii y Cuba, es sumamente interesante e ilustrativa en lo que al desarrollo tecnológico se refiere, así como también retrata el lado oscuro del capitalismo. El espacio que comprendió su primer núcleo lo constituye la Hacienda Oyague, la cual fue propiedad de Domingo José de Oyague en 1750 durante la época colonial; luego dichas tierras con el advenimiento de la República pasan a propiedad de los Bracamonte y Pinillos, terratenientes liberteños quienes en 1830 fundan La Hacienda Casa Grande. Es necesario remarcar que hasta ese momento, la capacidad de producción de las haciendas azucareras era muy limitada, por cuanto no se contaba con maquinaria industrial para su siembra y procesamiento, ni tampoco interés en adquirirlo, llevando esta situación al cultivo de caña para autoconsumo y en un brevísimo número para exportación. La forma tradicional de procesamiento de caña, el trapiche, seguía siendo un eje impulsado por bueyes, así como las vías de comunicación entre los diferentes cañaverales eran prácticamente nulas o inexistentes, motivo por el cual mucho de la cosecha se perdía y no se podía procesar.
Trapiche (Simonin, 1867)
Luis G. Albrecht Casa Grande
Luis G. Albrecht
Luis G. Albrecht, alumno del ingeniero alemán Liebig, nace en Münich, Bavaria, Alemania (otros señalan que en Bamberg, Alemania) el 19 de marzo de 1826, muy joven viaja a Estados Unidos y México en donde funda Casa Grande de Blancos, en Manzanillo dedicándose a la exportación de maderas. Llega al Perú por problemas de salud entre 1855 y 1856, casándose con Emilia Casanova y Velarde, hija del coronel Domingo Casanova, dueño de la hacienda Galindo; y se establece en Trujillo, adquiriendo la propiedad azucarera “Facalá” en el valle de Chicama en 1862, en la cual posteriormente se asocia con los hermanos Pflücker. Para 1865 adquiere la hacienda Sausal a fin de ampliar sus sembríos. Al inicio Albrecht siembra algodón en Facalá; el cual tenía buen precio y demanda debido a la guerra secesionista de Estados Unidos (la que conllevó a una enorme baja en la producción de los algodonales del sur de EEUU), pero dándose cuenta de la rentabilidad y facilidad de cultivo de la caña de azúcar en el valle, cambia de rubro y comienza con los cañaverales en Facalá, Sausal y Casa Grande. Como ya hemos mencionado, dándose cuenta del atraso tecnológico en cuanto la industria azucarera se refiere en nuestro país, fue un pionero en industrializar el cultivo de la caña de azúcar en el valle de Chicama, estableciendo el primer ingenio de importancia en la hacienda Facalá, aprox. en 1862. Asimismo, amplió el rubro de sus negocios a la explotación del cobre, en las minas de Quiruvilca, junto con Gottlieb, ganando notoriedad en el ámbito económico republicano.
Fotografía de la Hacienda Casa Grande
Postal de la Hacienda Casa Grande
Raimondi en su viaje realizado en 1868 le dedica algunas palabras al industrioso Albrecht: "Luego pasé a Facalá, célebre entre todas las del valle de Chicama, un hombre inteligente, activo y emprendedor, el señor Luis Albrecht, hizo surgir como por encanto esta hacienda del estado de decadencia en que se hallaba, introduciendo las más útiles mejoras, de manera que actualmente puede considerarse como la hacienda modelo de todo el valle de Chicama y la que representa el progreso en todos sus ramos. Se cultiva caña de azúcar, arroz, algodón y hay un surtido de máquinas, puestas en movimiento por la poderosa fuerza del vapor." A partir de 1870 como ya hemos señalado, la industrialización de la empresa azucarera triunfa, siendo en el valle de Chicama la fuerza utilizada principalmente la hidráulica seguida del vapor para las maquinarias, reemplazando a los obsoletos trapiches tirados por bueyes. En 1877 utilizando máquinas a vapor importadas de Filadelfia, la hacienda Lurifico (Chepen) elaboró 1000 quintales diarios de azúcar, mientras que la hacienda Facalá (hoy anexo Casa Grande) de los hermanos Pflücker en Chicama elabora 50000 quintales por año. En 1876 la hacienda Sausal de Albrecht produce 15 000 quintales de azúcar por año. Este incremento en la producción de caña conllevó a un incremento del consumo de la misma, motivo por el que Albrecht comienza a adquirir las tierras adyacentes a Casa Grande integrando ingenios con zonas de cultivo en un área industrializada, y en aquellas localidades en las cuales no se podía hacer esto lo que se acostumbraba era adquirir las cosechas de haciendas vecinas que no dispusiesen de ingenios para su procesamiento, al igual que Augusto Cabada, propietario de las haciendas Lache y Santa Ana, firmando ellos un contrato en 1871 en el que se estipulaba que Albrecht se comprometía a procesar en Casa Grande la caña producida en las tierras de Cabada debiendo recibir cada parte el 50% de la producción. Cuando Cabada adquiere su propia maquinaria, denuncia el contrato y es litigado zanjando el conflicto, la Corte Suprema de Lima a favor de Luis Albrecht el 24 de diciembre de 1877.
Monedas
Como vemos, eran tiempos prósperos para Casa Grande y para Albrecht, aunque es necesario mencionar en este punto que muchos de sus jornaleros eran coolíes (chinos), viviendo explotados en muchos casos llegándose a excesos en otros, al tomar los capataces la justicia por su propia mano. (texto de investigación de Augusto Salazar)
COOLÍES
Por ello, a pesar de las prohibiciones legales, como en 1853, y de las protestas internacionales, la llegada de los coolíes al Perú fue continua y creciente. Y en este interés no sólo estaban los hacendados sino también los contratistas que vieron en el tráfico de peones chinos un negocio muy lucrativo. De este modo, entre 1849 y 1874, llegaron alrededor de 87 mil coolíes a nuestro país. Mencionamos que fue un sistema de semi-esclavitud porque de por medio existía un contrato de trabajo entre el hacendado y los peones chinos. El trabajador no era propiedad de un patrón al que podía dejar al momento de finalizar su tiempo obligatorio precisado en su contrato, generalmente de 8 años, y si le era conveniente aceptaba de manera voluntaria volver a contratarse con el mismo hacendado.
Peón chino en una hacienda de caña;
nótese los grilletes en los pies
Luego, vino el descalabro nacional, la Guerra del Pacífico. También es necesario señalar que Luis Albrecht era casado de una prima del militar chileno Patricio Linch (se dice que gracias a esto pudo negociar condiciones favorables sobre los cupos, no está comprobado esto último, lo que sí se conoce es que luego de la guerra Albrecht quebró). Al producirse la toma de Lima, una Expedición comandada por Linch recorre el norte del país, imponiendo cupos a las industrias que encontraba a su paso con la amenaza de destruirlas, llegando a hacer lo mencionado con las haciendas de Dionisio Derteano y otras del valle del Santa. En Trujillo se formó el batallón Libres de Trujillo a cargo del coronel Justiniano Borgoño, el cual luchó en las batallas de San Juan y Miraflores. Posteriormente se formó el batallón n° 01 integrando sus filas el capitán Ranieri Manucci, italiano, saliendo al puerto de Salaverry para impedir el desembarco de los chilenos. Luis Albrecht en ese momento decide alojar a algunos centenares de trujillanos en su hacienda Casa Grande, amparándolos bajo el pabellón imperial alemán.
Al llegar Linch a Trujillo, impuso un cupo de 35 000 soles a la ciudad, caso contrario la ocuparía, siendo el alcalde de la ciudad Cecilio Cox. Trujillo (y todo el país) atravesaba por una crisis económica pero ante las demandas de Linch había que pagar el cupo, Cox entrega 30 000 soles y Albrecht 5 000, de su propio peculio para salvar la ciudad. Luego de ello, Linch parte al valle de Chicama e impone un cupo de 40 000 soles, caso contrario el puente sobre el río Chicama sería destruido y las haciendas saqueadas. Cox y Albrecht negocian un descuento a 20 000 soles, sin embargo al no reunir el dinero en la fecha pactada Linch comienza a destruir el puente, motivo por el que Cox y Albrecht pagaron cada uno 10 000 soles nuevamente de sus propios recursos. Según una tradición trujillana, Albrecht lo abonó con su propio dinero pues dijo: "Los bienes se han hecho para remediar los males". Al término de la guerra y con las deudas adquiridas producto de los cupos, la falta de producción azucarera y la destrucción de mucha maquinaria industrial, en 1888 vende Casa Grande a otro alemán, Juan Gildemeister quien en 1889 funda la Sociedad Agrícola Casa Grande Ltda, pero ya eso es parte de otra historia. Luis Albrecht murió en Lima 8 de julio de 1891. Una urbanización y un Hospital en La Libertad llevan su nombre, y sus actos y nombre son recordados como parte de la tradición oral trujillana, como un inmigrante alemán de nacimiento, trujillano de corazón. (texto de investigación de Augusto Salazar)
Los Gildemeister
Juan Gildemeister
Juan Gildemeister (1823- 1898), nacido en Bremen Alemanía, funda en la ciudad de Lima la firma “Gildemeister”, dedicada al comercio. Luego en 1887, no obstante con el terremoto de 1866 y la guerra del Pacífico le causaron graves pérdidas que le obligaron a vender sus almacenes de nitratos en Tarapacá. Gildemeister adquiere la hacienda Casa Grande. Posteriormente compra otras haciendas como Lache, Sausal, Jaquez, Viscaíno, Gasñape y Molino; y funda la Sociedad Agrícola Casa Grande Limitada. Sociedad que convirtió en uno de los primeros ingenios azucareros del mundo. A su muerte, Enrique Gildemeister, un primo lejáno, toma la administración de sus haciendas y pone en marcha un ambicioso proceso de concentración de tierras con la compra de las haciendas Roma y Laredo.
LAS RELACIONES ENTRE PERU Y ALEMANIA, 1828-2003 Fabían Novak Talavera
El proceso de concentración de tierras en esta zona coge ímpetu entre 1885 – 1890 debido a la incapacidad de muchos propietarios de sobrevivir el desastre producido por la Guerra del Pacifico. La Sociedad Agrícola Casa Grande Limitada es el resultado de las compras de Gildemeister (Capital Alemán) que comienza adquirir haciendas en el valle Chicama a partir del año 1890. La Compañía Grace (capital norteamericano) adquieres la hacienda Cartavio en 1882, pero no la explota hasta 1891 cuando forma la Cartavio Sugar Co. Luego un nuevo ciclo de concentración ocurre después de 1902 con la baja drástica del precio de azúcar en el mercado mundial. El tercer y último ciclo de concentración tiene lugar durante y después de la primera guerra mundial. Notablemente en 1927 Casa grande compra la propiedad de Víctor Larco (ex Tulupe y entonces Roma y demás tierras). A principios del siglo había sido el magnate azucarero más poderoso del valle. Esta compra le da a Casa Grande una posición incontestable de dominación, con aproximadamente 13.460 fanegadas (medida variable de tierra cultivable según la región entre 0.5 a 0.7 hectáreas) de tierra en comparación a las 2.206 fanegadas de Cartavio. Texto: Jose Carlos Mariategui (7 ensayos de la realidad peruana) Gildemeister con su Casa Grande, junto a otros terratenientes de origen extranjero, fueron conocidos en el argot popular del norte como los “Barones del azúcar”. El espíritu emprendedor de estos hacendados, la utilización intensiva de fertilizantes y pesticidas, la fuerza económica de sus capitales y la mecanización de sus haciendas, les permitieron la maximización de beneficios y la conquista de las tierras agrícolas del Valle Chicama que provocó la desaparición de los medianos hacendados trujillanos. Posteriormente en 1915, el gobierno de Benavides le entregó a los Gildemeister la concesión del puerto de Malabrigo para la salida e ingreso de los productos de la referida hacienda al puerto y más tarde abrieron un bazar para vender sus propias mercaderías. Si bien la hacienda terminó siendo expropiada durante el régimen dictatorial del general Velasco Alvarado en 1968, lo cierto es que durante su vigencia se convirtió en el primer ingenio azucarero del mundo, por encima de Hawai y otros, y forma parte de nuestra historia económica nacional.
EL SISTEMA DE ENGANCHE PARA ADQUIRIR TRABAJADORES DE LAS SERRANIAS DE CAJAMARCA
En el año 1980 se implanto un sistema de enganche. El enganchador (persona intermediaria que buscaba mano de obra) usaba la presencia de oro para persuadir y de otros artificios para convencer y llevar a los campesinos de las serranías de Cajamarca a trabajar a los cañaverales de la Hacienda de Casa Grande. Por los trabajos que realizaba cada trabajador que el reclutaba “el Enganchador” le pagaba con vales que sólo servirían para ser consumidos en sus bodegas productos con precios recargados. Todo esto con el permiso del hacendado. Como el contrato que los peones firmaban especificaba que ellos no podían dejar el trabajo hasta que culmine el contrato o hasta cuando salden sus deudas ellos terminaban explotados y en caso de rebelión se les denunciaba y terminaban en la prisión. Trabajaban de 6 a.m. a 6 p.m. con un descanso de las 11 a.m. y su pago por casa jornada era de 50 centavos. Esto dio principio a la gran población de origen de Cajamarca que tiene el actual distrito de Casa Grande.
LIBRO NEGRO EN LA HACIENDA DE LOS GILDEMEISTER
Era un libro de actas donde se daba juicio por los despidos a los trabajadores que por motivos de inmoralidad, indisciplina e insubordinación se daba registro, como: violencia y violación a menores de edad, adulterio, fornicación, violencia con el cónyuge, embriagues en la hora de trabajo, faltas injustificadas en la labor, insubordinación con su capataz.
CASA GRANDE - PERÚ Y EL VALLE DE SUNCHUBAMBA Walter H. Wust, Revista Viajeros Conservación y Culturas July 2007 Secretos de Sunchubamba
Alguna vez la hacienda Casa Grande, propiedad de la familia Gildemeister, fue la mayor productora de azúcar de América. Asociada con una casa comercial de Bremen, Alemania, superaron las vicisitudes que asolaron el campo por aquellos tiempos y lograron edificar un ingenio capaz de procesar tres mil toneladas de caña al día. Durante los primeros años de 1920, la hacienda adquiría más de 400 reces al mes, además de carneros, papas, cebada y otros cereales, para abastecer los tambos de sus rancherías.
Con el objeto de asegurar su aprovisionamiento –y reducir los altos costos que ello originaba– Hans Gildemeister compró los fundos de Sunchubamba y Huacraruco, de 43 mil y 75 mil hectáreas, respectivamente, con las que formó la empresa agrícola más importante del país. Así, Casa Grande pasaba a controlar un territorio que superaba en tamaño a algunos países europeos, administrado gracias a una extensa red de carreteras, líneas telefónicas y hasta ferrocarriles construidos expresamente para su funcionamiento. Eran pues, tiempos muy distintos a los de hoy en la sierra liberteña. Ciertamente existieron abusos por parte de los administradores, contratados especialmente desde Alemania para manejar los fundos. Como ejemplo basta mencionar que el reloj construido por Luís G. Albrech en la hacienda llevaba una inscripción que rezaba: tace, ora et labora, frases que fueron impuestas también por Luís G. Albrech, que en latín significa ‘calla, reza y trabaja’. Esas frases fueron expuestas hasta cuando se implanto el cooperativismo con la Reforma Agraria. Es verdad también que se ganaba poco y que existía una estrecha –y peligrosa– dependencia hacia los patrones, sin cuyo salario y provisiones, quedaban desvalidas miles de familias. Pero es cierto también que eran tiempos de gran productividad, de trabajo ordenado y de manejo eficiente de los recursos naturales.
Reloj construido y frases impuestas por Luís Albrech. Antes de la reforma agraria la representativa inscripción bajo el reloj de la casa hacienda Casa Grande, "tace, ora et labora”, "Calla, reza y trabaja". Esta foto es de los años sesentas. Casa Grande-Perú. Se conservaban las partes altas de las cuencas, se aseguraba el suministro de agua, la rotación de los pastos y de los cultivos. Se trataba a la tierra con respeto y se la hacía producir intensamente y con cariño. “Antes de ganaba menos, pero todos teníamos trabajo” –comenta don Aurelio mirando los verdes potreros sobre las montañas. “La gente vivía tranquila y feliz. Había mucho para repartir”. Hoy Sunchubamba es apenas un rezago del esplendor de antaño.
LA BUIATRÍA
En 1939 Helmut Kafka inició la inseminación artificial en Casa Grande y Julio Alencastre en Maranga en 1940. En 1943 se creó el Ministerio de Agricultura, con una Dirección de Ganadería. En 1943-46 se inició la enseñanza de Medicina Veterinaria en el Perú. En 1949 se inició la publicación de Veterinaria y Zootecnia, la primera revista nacional privada, vigente hasta la década de los 90. Los pioneros de la Buiatría en el Perú fueron los Drs. Helmut Kafka ( Hacienda Casa Grande), Julio Alencastre y Teodoro Ramos Saco, quienes combinaron sus trabajos de campo con la docencia universitaria.
FERRCOCARRILES DE CASA GRANDE – PERÚ: PUERTO CHICAMA (MALABRIGO) – VALLE CHICAMA
Red ferroviaria que servía a varios complejos azucareros del valle del río Chicama como Casa Grande, Sausal, Roma, Chiclín, Chicama y otros. De propiedad de la Sociedad Agrícola Casa Grande que después se transformaría en Empresa Agrícola Chicama. Era administrado por Gildemeister y Co. De trocha angosta 0.914 ó 1.06 m y una extensión de 304 km incluyendo desvíos y otros servicios. Empezó en 1915 desde Malabrigo. Mediante el ferrocarril Ascope-Trujillo quedaba interconectado a esta ciudad. Llegó a tener hasta 16 locomotoras, incluyendo una diesel, 3 carros de pasajeros y la sorprendente cantidad de 974 carros de carga. En 1950, últimas cifras que hemos hallado, transportó un total de once millones de toneladas. Fue reduciendo su operación con el tiempo y reemplazado por otros medios. La reforma agraria de 1969 afectó al complejo Chicama y los ferrocarriles terminaron por desaparecer completamente.
Hacienda Roma con los Gildemeister
La presente foto estuvo identificada como "Viaje a Casagrande", pero no indica cuál era la procedencia del vehículo. Se puede ver que tres mulas se requerían para mover el vagón, en un tedioso trayecto bajo altas temperaturas y caminos polvorientos. A la izquierda se puede apreciar, otra línea de rieles. (Colección Allen Morrison).
Esta foto muestra un vehículo desplazándose en la ruta de Salinar a Sausal, 20 kms. al este de Casa Grande.
Esta foto, tomada en el Sausal en 1926, muestra el mismo vehiculo y los mismos pasajeros de la foto anterior.
Esta vista fue tomada en la Hacienda Casa Grande en 1927. Los pasajeros parecen ser ejecutivos de la empresa y sus esposas.
Este vehículo parece necesitar pintura y algo que lo pueda hacer funcionar. ¿Los muchachos están listos para empujar o para saltar sobre el vehículo? Los caballos que se ven atrás, no parecen estar equipados como para tirar del vagón. Esta escena fue tomada en algún punto del Valle del Chicama.
Ferrocarriles operados por Gildemeister y Co en 1952. Recorrido km Trocha m
Casa Grande-Sausal 177 - 0.914 Interno hacienda Chicamita 6.4 - 0.914 Interno hacienda Chiquitoy 9.2 - 0.914 Interno hacienda Casa Grande 29 - 1.06 Interno hacienda Roma 21.5 - 0.914 Licapa-Casa Grande 28.5 - 1.06 Puerto Chicama-Licapa 31.4 - 1.06 TOTAL 303.8
Publicado Por: Guillermo E. Pinillos Ll.